Mercado do Bolhão de Oporto

Seguramente estés habituado a que te recomienden la visita de mil monumentos y catedrales cada vez que organizas un viaje a una nueva ciudad, pero pensamos que hay algo que puede definir mejor a un lugar que muchos de sus monumentos y plazas: sus mercados.

Y en ese sentido, el mercado más representativo de Oporto no es otro que el de Bolhão, un lugar donde puedes tomar el pulso al día a día de la ciudad y ver como los locales hacen sus compras más cuotidianas.


El edificio, de arquitectura neoclásica, fue construido en 1914 y no parece muy bien cuidado, de hecho, precisamente en su decadente aspecto es donde reside su mayor encanto (al menos para nuestro gusto).

Una perspectiva general del interior del Mercado do Bolhão.

Distribuidos en dos plantas, puedes encontrar multitud de puestos de frutas, verduras, carne o pescado (principalmente bacalao), como en cualquier otro mercado convencional, pero también verás alguno de animales vivos y, en la parte central de la planta inferior, algunos bares que no están mal de precio.

También se venden aves de corral en varios puestos del mercado.

Aunque no es normal ir a comprar fruta o carne (y mucho menos alguna gallina viva) mientras estamos de vacaciones, sí que es muy recomendable la visita a este mercado, pues como os decíamos al principio, es una de las mejores formas de sumergirse de lleno en la vida y costumbres de los portuenses. Además, hay varias tiendas de souvenirs donde puedes comprar los típicos imanes para tu colección del frigorífico, aunque el repertorio de artículos de recuerdo es mucho más amplio: Botellitas de licor, delantales, manoplas de cocina, llaveros... hay prácticamente de todo.

Un antiguo cartel en el interior del mercado.

Llegar hasta el Mercado do Bolhão es bastante sencillo, pues está muy cerca de la Avenida de los Aliados y tiene una estación de metro prácticamente a la puerta (parada de Bolhão, lineas A, B, C y E).

No dejes la visita para el domingo, pues este es el único día en que permanece cerrado.

Unos mercaderes en plena faena.

Y para saber más, no te pierdas nuestra Guía imprescindible de Oporto.